Miércoles, un miércoles cualquiera
de un agosto cualquiera…las 3 am de un Bruselas cualquiera… La ciudad
disfrutaba de su letargo, los pasos y algunas risas eran el único ruido de la
noche…algunos duermen, otros susurran y algunos otros se molestan del silencio…
Aquel hotel tenía una atmósfera
sobre-acogedora, arropada por una incierta calidez que prestaban aquellas
alfombras del averno que revestían todo en tonos rojizos intensos… pasillos
pesados de silencio en un supuesto estilo Luis Xxx mezclado con azulejos árabes
en un amplio muestrario de grecas inolvidables…y aquel vestíbulo de incierto
aire oriental que terminaba en una especie de patio andaluz con semifuente de
las mil y una noches…
Era pesado el zumbido de la noche,
imperturbable el calor de aquella calma bloqueada, era ansia escapada toda
aquella nocturna espontaneidad sobre todo y nada, era huida con la intención de
ser ausencia… y parecía que todo y nada salía como el guion había sido
preconcebido, y parecía y apareció aquel pañuelo arañando suelo…
- .-Señorita el pañuelo va rozando el suelo!!
- .- Gracias, no me había dado cuenta, ufff creo que ya no tiene remedio
he debido barrer medio Bruselas…
Se despidió de sus amigas y comenzaron a
entablar aquella conversación de ascensor típica de dos desconocidos: cómo te
llamas, de donde vienes, qué haces en Bruselas… jugaron a adivinar, a desveló
de casualidades, a coincididos en causalidades… a intimidades que solo los
desconocidos comparten… narraron unas horas compartidas entre noche y
reflejos de aquel bar a deshoras, las copas fueron ayudando a marcar la
retirada, se despidieron dentro del ascensor y al abrir las puertas ella
avanzo, apoyo un pie sobre la puerta del ascensor y una mano sobre mi cara… y
compuso aquel verso anodino;
- .- Ven conmigo, me gusta lo que tus ojos dicen
Y con la otra mano tiro de mi para sacarme
de aquel ascensor…
…y convirtió un beso en divo que te
arranca de tu ser, erizada sensación recorriéndome sin pudor… y creció la
necesidad, salvaje necesidad que nos convierte en espiral, y se embriagaron los
sentidos en un asentido perdido en libido sin pudor…
…y un cúmulo de instintos fueron
desvistiendo y emergiendo ansia y devoro….
…y la vida se convirtió en adición piel a
piel, violencia de lenguas que buscan humedad urgente, urgencia de labios en
humedades a recovecos de debilidades…
…y la desmesura aclamo ansia en fértiles embestidas, y aspiramos despropósitos en propósitos conquistados… y la gula del libido fue conquistando minutos…arañando naturaleza descontrolada que brota desde el interior…..
…y la desmesura aclamo ansia en fértiles embestidas, y aspiramos despropósitos en propósitos conquistados… y la gula del libido fue conquistando minutos…arañando naturaleza descontrolada que brota desde el interior…..
…y las sensaciones se convirtieron en
placer, en besos a bocados, en lluvia delirio, en playa humedecida de mar
revuelto…
…y nos deslizamos por dentro, y nos deslizamos por fuera, y fuimos lengua por espalda, y fuimos labios a temblar, y seducimos caricias en rincones sin memoria, en lascivos susurros que nos bebieron, en miradas silenciosas que nos deshicieron….
…y nos deslizamos por dentro, y nos deslizamos por fuera, y fuimos lengua por espalda, y fuimos labios a temblar, y seducimos caricias en rincones sin memoria, en lascivos susurros que nos bebieron, en miradas silenciosas que nos deshicieron….
…y la impaciencia nos paladeo en
insaciables, en mil provocados entre suspiros involuntarios… y fuimos un
ahogado en deleite, un aprisionado frenético que ansia mas caricias…
…y nos dejamos a huellas, y saboreamos mil
impregnados, y fuimos desborde de pasión, desdoble de miradas, sentir y calor,
lujuria y sudor… y una gota de sudor fue a caer en el hirviente de su pecho, y
una sonrisa de complicidad placer la dibujo delirante… deliciosa y delirante
que delicadamente envolvió mi traspirar en su pecho….
…y nos rodeamos, y nos tentamos, y nos
secamos…. Jugamos sobre piel en una danza bélica, y llegamos a la cumbre y nos
besábamos en el abismo, y tatuamos delirios por toda la piel, y fuimos
inexplicable existencia en un vibrar de vaivén… y fuimos dos y ratos uno….
…y caímos en un extenuado sueño, en un
dormir saciable procedente de la insaciable moral del deseo… y la mañana nos
trajo un mensajero de cordura, un regalo de horas en pasado, un despertar a la
codicia de vivir la propia vida, a proseguir el largo camino sin mas… sin
posibilidad de recordar y olvidar….
Jueves, un jueves cualquiera de un agosto
cualquiera…las 3 pm de un Bruselas cualquiera… La ciudad disfrutaba de su
ajetreo, los pasos apresurados de las compras, algunas risas en las
terrazas…algunos hablan, otros fotografían y algunos otros se molestan sin
silencio… Tengo un largo camino que recorrer…